¿Cuáles son los consejos de mantenimiento para la criba vibratoria lineal?
El mantenimiento de una criba vibratoria lineal es crucial para su óptimo rendimiento, longevidad y fiabilidad. El mantenimiento regular ayuda a prevenir averías, reduce el tiempo de inactividad y prolonga la vida útil del equipo.
Un mantenimiento regular y programado es clave para su longevidad. A continuación, se presenta un programa típico que puede adaptar a sus condiciones operativas específicas (por ejemplo, aumentar la frecuencia para materiales altamente abrasivos o para un funcionamiento 24/7).
Mantenimiento de cribas vibratorias lineales
I. Inspecciones regulares (diarias, semanales, mensuales, anuales):
Diariamente:
Realice una inspección visual del entorno de la máquina y de la propia máquina para detectar cualquier signo de acumulación de material, apelmazamiento o componentes sueltos.
Inspeccione el sistema de montaje y las protecciones de seguridad, asegurándose de que estén firmes y sin daños.
Inspeccione visualmente el material de la criba (malla, paneles) para comprobar su limpieza, la tensión adecuada y cualquier signo de desgaste, roturas o daños.
Compruebe que los cojinetes de la transmisión estén bien lubricados y que las líneas de grasa estén intactas, observando cualquier fuga excesiva de lubricante.
Escuche si hay ruidos anormales durante el funcionamiento.
Semanalmente:
Inspeccione el sistema de lubricación central (si está equipado) para detectar tuberías de grasa obstruidas o fugas.
Compruebe la temperatura de los cojinetes después de que la máquina haya estado funcionando durante al menos cuatro horas con un termómetro infrarrojo.
Inspeccione el vibrador y todos los pernos para detectar si están flojos.
Compruebe los resortes de goma para detectar daños.
Mensualmente:
Inspeccione las correas trapezoidales de transmisión y los sistemas de transmisión para detectar desgaste, tensión y fugas. Reemplace el conjunto de correas trapezoidales desgastadas, dañadas o faltantes. Realice una inspección exhaustiva de todas las conexiones atornilladas, apretando los pernos sueltos y reemplazando cualquier pieza faltante.
Inspeccione la estructura del marco de la criba y las soldaduras para detectar grietas. Si encuentra grietas, limpie la superficie, perfore agujeros en los extremos para evitar que se extiendan, palee la ranura, precaliente y repare la soldadura (asegúrese de que penetre y aplane completamente después de soldar). Añada placas de refuerzo si es necesario, evitando agujeros o accesorios de soldadura en el marco de la criba para evitar la concentración de tensiones.
Anualmente:
Revise el vibrador: desmóntelo completamente para su limpieza. Reemplace los rodamientos si están picados o rotos. Al volver a ensamblarlo, asegúrese de que las posiciones del bloque excéntrico del vibrador mantengan la misma fase.
Considere programar una evaluación profesional (por ejemplo, el servicio PROcheck).
II. Prácticas clave de mantenimiento:
Lubricación:
Una lubricación adecuada es esencial para un funcionamiento fluido. Lubrique regularmente los rodamientos, los mecanismos de transmisión y otras piezas móviles según las recomendaciones del fabricante.
Utilice el lubricante adecuado (p. ej., grasa de litio n.° 2 en invierno, grasa de litio n.° 3 en verano) y aplíquelo en las cantidades recomendadas. Evite el llenado excesivo.
Para los excitadores de vibradores, inyecte aceite generalmente una vez por semana (300-600 ml).
Para las conexiones estriadas de los acoplamientos, inyecte aceite cada 1200 horas de funcionamiento.
Si los rodamientos se sobrecalientan, compruebe si la lubricación es insuficiente o excesiva, si la calidad del lubricante es incorrecta o si el prensaestopas presiona contra el anillo exterior.
Apriete los componentes flojos:
La vibración puede provocar que los pernos, las tuercas y los sujetadores se aflojen. Revise y apriete regularmente todos los componentes, especialmente los paneles de la pantalla, los sistemas de sujeción y los soportes del motor, para mantener la integridad estructural y evitar vibraciones excesivas. En las primeras etapas de funcionamiento, revise los pernos a diario.
Utilice pernos y contratuercas de alta resistencia, aplique líquido antiaflojamiento y considere el uso de resortes de disco antiaflojamiento y manguitos de poliuretano para prevenir el desgaste.
Limpieza de la malla:
Limpie regularmente la superficie de la malla para eliminar la acumulación de material, residuos u obstrucciones con un cepillo, un soplador de aire o un rociador de agua (según el tipo de malla y material). Esto mantiene un cribado eficiente y evita que el peso excesivo la tense.
Reemplazo de componentes desgastados o dañados:
Reemplace rápidamente las mallas desgastadas, rotas o dañadas (malla metálica, paneles).
Reemplace los rodamientos, las correas de transmisión, los resortes y los componentes de la suspensión (resortes helicoidales, soportes de goma) desgastados o dañados para evitar fallas del equipo y mantener un rendimiento óptimo. Al reemplazar los resortes, asegúrese de que los nuevos tengan las mismas especificaciones y reemplace los resortes simétricos simultáneamente para evitar cambios de amplitud. Los resortes de goma suelen durar entre 15 y 20 meses.
Balanceo:
Puede ser necesario balancear periódicamente para garantizar un funcionamiento fluido, ya que una distribución desigual del peso puede provocar vibraciones excesivas. Consulte las instrucciones del fabricante o busque asistencia profesional.
Asegúrese de que los soportes de los resortes estén en el mismo plano horizontal y de que la compresión de los resortes sea uniforme.
Ajuste los ángulos del contrapeso para que sean uniformes.
Siga las instrucciones del fabricante:
Siga siempre las recomendaciones específicas para su modelo de criba vibratoria lineal en cuanto a intervalos de mantenimiento, lubricación y otros requisitos.
Capacitación y formación:
Brinde capacitación adecuada a los operadores y al personal de mantenimiento sobre el funcionamiento correcto, el mantenimiento, los posibles peligros y los procedimientos de seguridad. Incentive la notificación inmediata de cualquier problema.
III. Prevención de problemas comunes:
Flujo de material anormal:
Asegúrese de que la caja de la criba tenga la rigidez adecuada y que el nivel horizontal sea preciso.
Revise si hay pernos de conexión flojos o malla de criba dañada.
Asegure una alimentación uniforme y continua, evitando la sobrecarga.
Ajuste los bloques excéntricos según sea necesario para optimizar el movimiento del material.
No se puede arrancar o la amplitud es baja:
Revise si hay obstáculos eléctricos, motores de vibración dañados o voltaje insuficiente.
Elimine la acumulación excesiva de material en la superficie de la criba.
Limpie y repare el vibrador si la grasa está condensada o aglomerada.
Ajuste la posición del bloque de contrapeso del eje excéntrico o del bloque subexcéntrico.
Sobrecalentamiento del rodamiento:
Asegúrese de que la lubricación sea adecuada (cantidad y calidad).
Confirme que haya un espacio entre el prensaestopas y el anillo exterior del rodamiento para la disipación del calor.
Evite la entrada de lodo en la tapa del extremo del rodamiento inspeccionando y reemplazando regularmente los anillos de sellado.
Reemplace los rodamientos dañados a tiempo.
Mala calidad de cribado:
Limpie los orificios del tamiz obstruidos y ajuste la cantidad de agua de pulverización y la inclinación de la malla.
Repare o reemplace la malla del tamiz si está muy desgastada.
Ajuste el ancho de la tolva de alimentación para una distribución uniforme del material.
Asegúrese de que la dirección de movimiento de los bloques excéntricos esté en la misma fase en las cribas vibratorias lineales.
Grietas (placa lateral, viga, marco del tamiz, puerto de descarga):
Evite el funcionamiento prolongado a frecuencias críticas.
Apriete regularmente los pernos de alta resistencia.
Reemplace los resortes muy deformados.
Asegúrese de que el error de peso del bloque excéntrico sea mínimo.
Refuerce los tubos de pared delgada, añada nervaduras o engrose las placas laterales si es necesario.
Evite paradas repentinas bajo cargas pesadas.
Asegure el correcto funcionamiento del sistema de amortiguación.
Al implementar estos consejos de mantenimiento, puede mejorar significativamente la eficiencia, prolongar la vida útil y garantizar el funcionamiento seguro de su criba vibratoria lineal.